¿Por qué no me dijiste que estabas construyendo
ese castillo de arena?Hubiera sido tan hermoso
poder entrar por su pequeña puerta,
recorrer sus salados corredores,
esperarte en los cuadros de conchas,
hablándote desde el balcón
con la boca llena de espuma blanca y transparente
como mis palabras,esas palabras livianas que te digo,
que no tienen más que el pesodel aire entre mis dientes.
Es tan hermoso contemplar el mar.
Hubiera sido tan hermoso el mar
desde nuestro castillo de arena,
relamiendo el tiempocon la ternura
honda y profunda del agua,
divagando sobre las historias que nos contaban
cuando, niños, éramos un solo poro
abierto a la naturaleza.
Ahora el agua se ha llevado tu castillo de arena
en la marea alta.Se ha llevado las torres,los fosos,
la puertecita por donde hubiéramos paseado
en la marea baja,cuando la realidad está lejos
y hay castillos de arena
sobre la playa...
Gioconda Belli entra una vegada més per la porta dels meus
pensaments i ho fa com sempre, descalça, amb cura, amb
una carícia dins d'aquest fred d'hivern...
1 comentari:
No conocía este poema.
Es precioso.
Castillos de arena.
Los únicos indestructibles.
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